En Valdemar siempre hemos apostado por una bodega abierta a todos.
Por ello hemos desarrollado la primera la primera visita enoturística 100% inclusiva y accesible a todas las personas con cualquier tipo de discapacidad (visual, auditiva, física, cognitiva u orgánica).
Una experiencia basada en los sentidos, en los sentidos que nos unen a todos, el Olfato, el Gusto y el Tacto.
También apostamos por las Familias.
Por ello creamos la experiencia familiar, donde todos sin excepción disfrutamos de la bodega.